Pesar objetos diminutos como una bacteria, un virus o incluso un átomo, medir la presión sanguínea en el interior de las venas o posicionar aviones y satélites. Nada de esto sería posible en la actualidad sin las aplicaciones derivadas de la nanomecánica, un área de investigación que se ocupa del estudio del movimiento a escala nanométrica y que protagoniza el número 113 de la colección ‘¿Qué sabemos de?’ (CSIC-Catarata).

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) proponen un método de detección del coronavirus SARS-CoV-2 alternativo a las PCR, más rápido, menos costoso y a gran escala, basado en balizas moleculares. La técnica emplearía “sensores” de ADN que emiten fluorescencia en presencia del ARN diana (en este caso, el ARN del coronavirus). El objetivo es detectar la presencia de ARN viral en la muestra de una manera directa y sin necesidad de los costosos pasos intermedios de amplificación de ácidos nucleicos que requieren las PCR.

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han logrado medir por primera vez la frecuencia de resonancia de una sola bacteria. Mediante dispositivos optomecánicos (que miden luz y movimiento), los investigadores han observado que las bacterias vibran cientos de millones de veces por segundo. La frecuencia de resonancia del microorganismo aporta valiosa información sobre sus características, de modo que permite identificarlo.

El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) participa en los dos nuevos grandes equipos de microscopía que acogerá el Sincrotrón ALBA, de Barcelona, uno dedicado a la ciencia de materiales, valorado en 4,1 millones de euros, y otro orientado a la biología molecular, valorado en 1,7 millones de euros. Se trata de dos proyectos que han recibido financiación europea del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y que prevsiblemente empezarán a construirse a finales de año y que se podrían poner en funcionamiento en dos años.

La quinta edición de este evento de divulgación científica llega con una novedad para estos días de confinamiento: el vermú de nanociencia, una serie de charlas en streaming que podrán seguirse cada lunes, miércoles y viernes en el canal de youtube de ‘10alamenos9’. Investigadores del CSIC como Dani Rueda intervendrán en estas citas virtuales, en las que el público también podrá formular preguntas.

Un equipo de investigadores con participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha conseguido diseccionar el origen de la luz emitida desde un conmutador molecular. Con este dispositivo, que permite encender y apagar de manera rápida una determinada señal óptica emitida por una única molécula, los científicos han logrado identificar que los destellos de la emisión están relacionados con el movimiento de un par de átomos de hidrógeno que conmutan sus posiciones en la molécula.

El ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, y la presidenta del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Rosa Menéndez, han visitado hoy el Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología (CINN), centro mixto del CSIC, la Universidad de Oviedo y el Gobierno del Principado de Asturias, para conocer las investigaciones que se llevan a cabo en la Unidad de desarrollo de materiales multifuncionales, situada en San Martín del Rey Aurelio, donde

El Instituto de Microelectrónica de Madrid ha instalado un novedoso equipo de litografía por haz de iones que permitirá fabricar estructuras nanométricas de forma más segura y eficiente, ya que permite fabricar con tamaños de 10 nanómetros en superficies de hasta 100 cm² frente a las milésimas de centímetro cuadrado actuales, lo que permitirá satisfacer las demandas tanto del mundo empresarial como del científico.   

El pasado jueves 28 de octubre tuvo lugar en el Museo Reina Sofía de Madrid el acto Cuando los extremos se tocan: ciencia y arte, lo grande y lo pequeño, organizado por la Universidad Autónoma de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) con el objetivo de acercar los mundos del arte y la ciencia con la imagen como nexo.

Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC),  la Universidad de Delft (Holanda) y el Institut Català de Nanotecnología ha logrado emplear corrientes eléctricas para desplazar grandes cantidades de átomos, moléculas o agregados de forma controlada.