El CSIC recibe 5 millones de euros para proyectos de investigación en Inteligencia Artificial

El Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU), a través de la Agencia Estatal de Investigación (AEI), ha publicado la resolución de la convocatoria de proyectos de investigación en el ámbito de la inteligencia artificial (IA), que concede 4,87 millones de euros para financiar investigaciones del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en IA aplicada a áreas como la química, la salud, el medioambiente o el desarrollo tecnológico.

El objetivo de esta convocatoria, que cuenta con un presupuesto total de más de 30 millones de euros con fondos propios de la AEI, es impulsar proyectos de IA destinados a dar respuesta a los grandes desafíos científicos, técnicos, sociales y económicos de nuestros días.

En línea con la Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial, la convocatoria fomenta la consolidación de una masa crítica de investigadoras e investigadores en IA, ya que cada proyecto contará con uno o dos investigadores principales, un equipo de investigación que tendrá al menos dos investigadores/as y un equipo de trabajo.

Proyectos del CSIC financiados en la convocatoria

La convocatoria financiará el proyecto denominado 2AID (Autonomous Artificial Intelligence Driven Discovery of Sustainable Fuels, Industrial Feedstocks, and Materials), liderado por el Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea (ISQCH) -centro mixto del CSIC y la Universidad de Zaragoza (UNIZAR)-, y con participación del Instituto de Investigaciones Químicas (IIQ-CSIC), el Institut Català d’Investigació Química, la Universitat Rovira i Virgili y la Universidad de Granada. Su objetivo es impulsar el desarrollo de nuevas herramientas inteligentes capaces de diseñar, analizar y optimizar materiales, combustibles y procesos químicos más sostenibles.

También recibirá subvención el proyecto OBSAIRE (Observaciones y Ciencia de Datos Basada en Inteligencia Artificial para la Reconstrucción y Evaluación de la Calidad del Aire), coordinado por el Instituto de Diagnóstico Ambiental y Estudios del Agua (IDAEA-CSIC) y la Universidad de Zaragoza, que se enmarca en la iniciativa AIR, liderada por el Barcelona Supercomputing Center (BSC). Su misión es construir la base de datos de calidad del aire más completa, homogénea y preparada para su uso mediante IA en España, integrando mediciones reglamentarias, datos científicos de alta resolución y observaciones satelitales. Los resultados permitirán a las administraciones mejorar sus diagnósticos, diseñar estrategias de mitigación más eficaces y desarrollar planes regulatorios.

Además, el Instituto de Ciencias del Mar (ICM-CSIC) participa en AI4SEA, un proyecto coordinado por la Universidad de Girona (UdG) que desarrollará un sistema autónomo para mapear, restaurar y monitorizar hábitats marinos mediante inteligencia artificial (IA) y robótica submarina. En concreto, este instituto, que asume un papel clave en la validación ecológica y en la aplicación responsable de la IA en el medio marino, lidera el subproyecto AI4ECO para desarrollar indicadores biológicos y modelos predictivos a partir de vídeos submarinos, sensores ambientales y series temporales.

Asimismo, el ICM-CSIC participa en el proyecto coordinado TWINPEACS, cuyo objetivo es crear un gemelo digital de las costas españolas mediante la integración de modelos físicos y técnicas de inteligencia artificial. Esta herramienta permitirá reproducir y predecir inundaciones, erosión y cambios morfológicos, mejorando la planificación y la adaptación al cambio climático. En concreto, el instituto lidera el subproyecto 2 (TWINPEACS: MORFO), centrado en predecir la evolución de playas y fondos someros mediante modelos avanzados de IA.

La convocatoria también financiará el proyecto Aprendizaje Automático en Simulaciones Cuánticas con Átomos de Rydberg (ML-QSIM), liderado por investigadores del CSIC pertenecientes al Centro de Investigación en Nanomateriales y Nanotecnología (CINN, CSIC-Universidad de Oviedo-Principado de Asturias) y que cuenta con la participación del Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid (ICMM-CSIC) y el Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón (centro mixto del CSIC y UNIZAR), además del Computer Vision Center en Barcelona. Este proyecto combina la computación cuántica con la inteligencia artificial para construir una plataforma avanzada donde el hardware y los algoritmos trabajen juntos para resolver problemas complejos del mundo real de manera más eficiente que los ordenadores clásicos. El hardware está basado en átomos de Rydberg, un tipo de átomo altamente excitado -es decir, con un mayor nivel de energía que otros- que se presenta como una plataforma prometedora para el desarrollo de la computación cuántica.

Por su parte, el proyecto AICONTROL del Instituto de Filosofía del CSIC (IFS-CSIC) estudia cómo controlar la inteligencia artificial entendida como un sistema complejo capaz de generar comportamientos inesperados. Para ello, integra conocimientos de ciencias de la complejidad, teoría de redes y ética. Su objetivo es crear un marco de gobernanza que combine controles técnicos, sociales y éticos. El equipo también examina el impacto de los sistemas automatizados en la toma de decisiones públicas y en la calidad democrática, con el fin de proponer mecanismos que garanticen que la IA sea más segura, transparente y compatible con los valores democráticos.

El Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) participa en el subproyecto SP3: HEAT4GRAINS, dedicado al desarrollo de algoritmos de entrenamiento de redes neuronales que reduzcan de forma significativa el consumo energético. Su objetivo es posibilitar que la próxima generación de sistemas de inteligencia artificial sea más eficiente, sostenible y adecuada para dispositivos con recursos limitados. Esta investigación se enmarca en el proyecto GRAINS, que reúne a especialistas en microscopía, inteligencia artificial y hardware eficiente para abordar retos que ninguna de estas disciplinas podría resolver por separado.

Por último, personal investigador del Instituto de Biología Integrativa de Sistemas (i2SysBio) y del Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) también participa en el proyecto AI in vivo, coordinado por la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), el cual busca sentar las bases para una nueva generación de inteligencia artificial a partir de circuitos biomoleculares en células vivas. En concreto, los equipos del CSIC están desarrollando biocircuitos de ADN y ARN, mediante técnicas de biología sintética, que permiten a las células procesar información y tomar decisiones, en un proceso similar al de un ordenador que analiza datos, pero dentro de organismos vivos. Estas innovaciones forman parte del subproyecto ADA LOVELACE in vivo y podrían abrir nuevas vías en biomedicina, permitiendo, por ejemplo, terapias más precisas y personalizadas.

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