El centro Matgas cumple diez años

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El laboratorio de investigación y desarrollo en materiales y gases Matgas, ubicado en Cerdanyola del Vallés (Barcelona), ha celebrado hoy miércoles, 1 de junio, el décimo aniversario de su creación. Entre las líneas de investigación del centro, surgido de una alianza entre el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad Autónoma de Barcelona, la empresa Carburos Metálicos y el grupo Air Products, destaca la conversión de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en un recurso o en materiales con un alto valor añadido.

Al acto conmemorativo han asistido, entre otros, el presidente del CSIC, Rafael Rodrigo, la directora de Matgas, Lourdes Vega, la rectora de la Universidad Autónoma de Barcelona, Ana Ripoll, y el director de Márketing Global de Air Products, George Decrop. Durante el acto se ha destacado el carácter “único” de este laboratorio, creado a partir de la unión de instituciones públicas y empresas privadas.

El décimo aniversario incluye también la celebración de un simposio internacional donde se expondrán los avances más significativos en energía, sostenibilidad y medio ambiente. El campus de la Universidad Autónoma de Barcelona acoge hoy miércoles, 1 de junio, y mañana jueves, 2 de junio, una serie de conferencias que comenzarán con una revisión de los proyectos desarrollados por Matgas.

Además de expertos españoles en este campo, entre los que se encuentran investigadores del CSIC, en el simposio participan ponentes como Robert Amstrong, que trabaja en el Massachussets Insitut of Technology (Estados Unidos), que impartirá una conferencia plenaria sobre energía y medio ambiente, Michele Aresta, científico en la Universidad de Bari (Italia), que centrará su conferencia plenaria en el uso de dióxido de carbono en diversos procesos químicos, o Andreas Züttel, del Swiss Federal Laboratories for Materials Science and Technology (Suiza), que hablará del papel del hidrógeno en el almacenamiento de energía.

Convertir el CO2 en un recurso

Retener las emisiones procedentes de la quema de combustibles fósiles y convertir el CO2 en un recurso son algunas de las líneas principales de trabajo de Matgas. Para conseguir retener y reutilizar el CO2, lo primero es capturarlo en el punto de origen, allá donde se produce la emisión de los gases, para después almacenarlo, transportarlo y darle una nueva aplicación. Otra opción es almacenarlo permanentemente.

En Matgas se investigan nuevos procesos y sistemas para aplicar ese CO2. Algunos de ellos permiten retener permanentemente el gas, transformándolo en un nuevo material. En otros casos, se trata de usar el CO2 en aplicaciones que ya existen, pero que utilizan compuestos nocivos para los seres humanos y el medio ambiente. En estos casos, el dióxido de carbono no queda secuestrado, pero su uso permite evitar otros compuestos mucho más perjudiciales para el medio ambiente.

Algunos de estos procesos y tecnologías se investigan en el marco de grandes proyectos como el programa SOST-CENIT (Nuevos usos industriales y sostenibles del CO2), coordinado técnicamente por Matgas y que finalizará este año, o el proyecto Fundación Ciudad de la Energía, que supone el desarrollo de una planta piloto para experimentar con la captura y el almacenamiento de dióxido de carbono. Matgas colabora con este último estudiando el efecto del CO2 en las rocas en las que será almacenado.

Nota de prensa

 

 

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